En la actualidad, existen 88 constelaciones dentro de la astronomía moderna, las cuales son producto de años de exploración e investigación de nuestro cielo nocturno. Muchas de ellas, han sido nombradas en honor a personajes de leyendas o inventos de la ilustración, mientras que otras conmemoran a enormes bestias de las antiguas mitologías. Tal es el caso de la constelación Cetus o Constelación de La Ballena, una enorme agrupación de astros que destaca en el cielo austral.
¿Cuál es la constelación Cetus?
Reconocida por diferentes civilizaciones como “Ceto”, “La Ballena” o “El Monstruo Marino”, constituye un cuerpo de estrellas que dibujan la figura de una gran bestia con cola en el hemisferio sur del firmamento. La misma es considerada la cuarta constelación más grande, al imponerse en el cielo nocturno con una extensión de 1.231 grados cuadraros.
De igual forma, la constelación Cetus o constelación de La Ballena es visible completamente a latitudes entre 79° sur y 65° norte, sobre todo entre los meses de octubre y enero. Esta se caracteriza por localizarse a lo largo de nuestro ecuador, rodeada por varias constelaciones referenciales. En este sentido, se encuentra limitada al norte por los cuerpos celestes de Piscis y Aries, al sur por Fornax y Scultor, al oeste por Taurus y Eridianus, y al este por Aquarius.
Historia de la constelación Cetus
Esta conformación cósmica tiene su génesis dentro de las grandes leyendas y mitos de la Antigua Grecia. De acuerdo con esta, la constelación Cetus hace referencia a la bestia marina Ceto enviada por Poseidón a destruir el Reino de Etiopía. Esto como represalia, luego de que la Reina Casiopea insultara a las Nereidas al afirmar que su hija era la más bella de todas.
De esta forma, con el objetivo de calmar a Ceto, los Reyes Cefeo y Casiopea entregaron a su hija Andrómeda en sacrificio. Sin embargo, Perseo logró destruir a Ceto y salvar a Andrómeda, utilizando la cabeza de Medusa, a la que recientemente habría derrotado. Por lo que, Poseidón decidió ascender a la bestia marina al cielo nocturno para conmemorarla por su trabajo.
Posteriormente, la constelación Cetus fue cataloga por primera vez en el Almagesto del siglo II a.C como parte de las 48 constelaciones antiguas. La misma fue descrita en una región llamada Agua, donde se encuentran otros cuerpos celestes de este elemento, como lo son Eridianus o el rio, y Aquarius o portador del agua.
Actualmente, ocupa el puesto numero 4 dentro las 88 constelaciones modernas reconocidas por la Unión Internacional de Astronomía.
Estrellas de la constelación Cetus
Esta gran agrupación de astros, está constituida por 189 estrellas descritas hasta la actualidad. De las cuales, la más brillante de todas es la gigante naranja β Ceti, también conocida como Deneb Kaitos o Diphda. La misma cuenta con una magnitud de 2.04 y se ubica a más de 96 años luz de distancia.
De igual forma, la constelación Cetus cuenta con el astro α Ceti o Menkar, siendo este una gigante roja cuya luminosidad supera 380 veces la de nuestro sol. Además, este cuerpo celeste integra la conocida estrella ο Ceti, también llamada Mira, siendo este un astro variable con magnitudes que cambian entre 2 y 11.
Objetos del cielo profundo
En el interior de la constelación Cetus podemos encontrar una vasta cantidad de galaxias, cúmulos y nebulosas de gran interés para la astronomía. Entre ellas, la conocida galaxia espiral barrada M77 ubicada a más de 47 millones de años luz.
Por otro lado, está la Galaxia de Wolf-Lundmark-Melotte, perteneciente al Grupo Local en el cual se encuentra nuestra Vía Láctea. Además, la constelación Cetus cuenta con las galaxias espirales NGC 45, NGC 217, NGC 247, NGC 615 y NGC 908, así como también con la Nebulosa del Esqueleto NGC 246.
No obstante, la constelación Cetus aun continua en exploración e investigación por parte de astrónomos profesionales y aficionados. Los cuales cada día logran un paso más dentro del mapa estelar de nuestro cosmos.