Antes de hablar de la mitología nórdica o mitología vikinga debemos establecer un contexto. Entendemos como mitología nórdica a todo el conjunto de tradiciones y relatos originarios de los pueblos vikingos. Sin embargo debemos entender que no solo los que los romanos llamaron normandos (habitantes del norte) seguían algunas de estas creencias, puesto que hay un nexo étnico-cultural entre los habitantes de Escandinavia y los pueblos germánicos del centro del continente europeo.
Así pues nos encontramos con El Cantar de los nibelungos, poema épico medieval germánico en el que encontramos gran cantidad de elementos de la mitología nódica. Este cantar, convertido en ópera por el gran compositor alemán Richard Wagner, es también una de las principales fuentes para construir el universo de El Señor de los Anillos de J.R.R. Tolkien. Sin embargo, en este artículo nos centraremos exclusivamente en las creencias mitológicas de los pueblos nórdicos.
Historia de la mitología nórdica
Las muestras más antiguas de escritura en Escandinavia son runas grabadas en piedras o utensilios, que se remontan a la Edad de Hierro. Sin embargo, los relatos, leyendas y creencias de los antiguos vikingos no fueron recopilados hasta la confección de las Eddas, relatos histórico-mitológicos escritos durante y después de la cristianización, durante la Edad Media. No obstante, al haber sido uno de los últimos lugares de Europa en convertirse al cristianismo, muchas de las leyendas se han mantenido mediante el boca a boca incluso hasta nuestros días, convirtiéndose en algunos casos en Neopaganismo.
Características de la mitología nórdica
La religión vikinga, por llamarla de alguna manera, no se trata de una religión revelada, como por ejemplo el cristianismo, en la que una entidad superior aporta una serie de conocimientos a los mortales para que sean conscientes de la verdad. Además en la mitología nórdica no se nos presenta la típica dicotomía de las religiones orientales de una eterna lucha entre el bien y el mal.
Los dioses y los titanes representan simplemente poderes. De hecho los gigantes no son malvados per se, son oscos y brutos, pero en ningún caso malignos. Así pues la lucha entre los gigantes y los dioses no se ve como una lucha entre el bien y el mal, sino una lucha entre el orden (en el que viven los humanos) y el caos (la naturaleza salvaje). Además, una característica muy particular de esta religión es que los dioses son mortales y la única manera de permanecer vivos hasta el Raganarok es comer las manzanas de Iðunn, una Ásynjur o diosa.
Puesto que la mitología nórdica ha sido una tradición mayoritariamente oral, no cuentan con textos sagrados. Las Eddas son los únicos textos de donde hemos aprendido todas estas tradiciones. Textos que en muchos casos fueron confeccionados por monjes cristianos.
Los vikingos creían que el mundo estaba contenido en un disco en cuyo centro se encontraba Asgard, la morada de los dioses, a la que solo se accedía a través del arcoíris; rodeando Asgard se hallaba Midgard, donde vivían los hombres, más allá se encontraba el Mar y en los extremos del mundo está Jötunheim, la tierra de los gigantes. Y bajo el mundo estaba Nilfheim, el inframundo, con su zona más baja, donde reinaba la hija de Loki, Hela, Helheim. Este mundo se encontraría en una de las ramas de Yggdrasil, el árbol sobre el que reposan los nueve mundos.
Dioses de la mitología nordica
Al tratarse de un pueblo indoeuropeo, podemos encontrar símiles en su sistema politeísta con otras religiones de la época, como la misma religión griega. Sin embargo, pese a estas similitudes, la mitología nórdica se encuentra en una posición especial, debido a la complejidad y detalle que se ha dado a cada uno de los relatos. Las principales deidades vikingos se dividen entre los æsir, los dioses, y las ásynjur, las diosas. Así pues, aquí dejamos algunas de las principales deidades:
- Odín: El más noble e importante de todos. Considerado padre de los dioses y equivalente a Zeus. Podía adquirir varias formas, pero normalmente se le representa como a un anciano tuerto con un cayado. Imagen en la que Tolkien se inspiró para crear a su personaje Gandalf el Gris.
- Thor: Con su famoso martillo Mjolnir. Dios del trueno y la fuerza. Es hijo de Odín y probablemente se trate del dios más reverenciado de toda la mitología nórdica.
- Frigg: esposa de Odín, reina de los dioses y equivalente en parte a Afrodita. Es diosa del matrimonio, las labores del hogar, el amor, la previsión y la sabiduría.
- Freyja: literalmente “La Señora” una de las principales deidades vikingas. No obstante su rol original y las prácticas paganas de su culto se desconocen, debido a que fueron las fuentes cristianas las que recopilaron su mito.
El Ragnarök; el fin del mundo en la mitología nórdica
En la Völuspá, el primer y más destacado de la Edda poética, Odín conjuró el espíritu de una Völva, una especie de chamana o sacerdotisa, muerta. El objetivo de Odín es conocer el pasado y el futuro del mundo, ya que como rey del panteón anhela poseer todo el conocimiento para así ejercer su misión adecuadamente. La Völva le reveló entonces el pasado y el destino del mundo:
En el principio solo existían el mundo de hielo Niflheim y el mundo de fuego Muspelheim y en medio un gran hueco donde nada vivía llamado Ginnungagap. Ymir, un gigante primigenio vivía en un bloque de hielo junto a una vaca gigante llamada Auðumbla, de la cual se alimentaba mediante su leche. Cuando la vaca lamió el hielo, creó a Buri, el primer dios, padre de Bor, que a su vez era padre del resto de los æsir. Ymir, el primer gigante, era hermafrodita, y sus piernas copularon entre sí para engendrar a la raza de los gigantes.
La chamana describió la cosmología a Odín y le explicó el origen de los eclipses y por qué la luna y el sol recorren el cielo. Y entonces le habló del gran fresno Yggdrasil y concentró su atención en el futuro.
Según se contaba, en el final de los tiempos, las fuerzas del caos y la oscuridad superarían en número a los hombres y los dioses, las fuerzas del orden. Sería entonces cuando Loki y sus monstruosa prole romperían sus cadenas, los muertos navegarían desde Helheim para atacar a los vivos.
Sería entonces cuando el vigilante de los dioses Heimdall haría bramar su cuerno para llamar a las armas a las fuerzas del orden, que combatirían en la batalla final (Ragnarök), en la que serían derrotados, pues ese era su destino. Los dioses reunirán a sus mejores guerreros, pero serán incapaces de evitar que el caos absorba al mundo, siendo el propio Odín devorado por el lobo Fenrir. Dando fin a la mitología nórdica.
Tras la gran batalla, unos pocos supervivientes, hombres y dioses, serían los encargados de repoblar la Tierra y comenzar de nuevo el ciclo.
Para saber más sobre la mitología nórdica te invitamos a ver este vídeo: