Xiang Yao

Xiang Yao era una criatura mitológica que ayudaba a Gong Gong a crear desgracias para la tierra. Xiang Yao es un monstruo maligno y venenoso, una de las más horripilantes representaciones del mal que habita en las aguas. Suele representarse como un monstruo de nueve cabezas y una cola de serpiente. En algunos casos se confunde a Xiang Yao con el propio Gong Gong, quizás por la naturaleza que ambos comparten.

Las nueve cabezas por lo general se reparten en tres grupos que apuntan en tres direcciones diferentes. En otras ocasiones, se suele dibujar como nueve cuellos y nueve cabezas que salen del cuerpo de la criatura. Otra representación de este monstruo es a partir un solo cuello del cual se erigen las nueve cabezas en un solo gajo y cada una de ellas con mirada hacia una dirección diferente.

El cuerpo de Xiang Yao se dispone enrollado sobre sí mismo, lo que ayuda a ver a la criatura aún más estremecedora de lo que en realidad es. Otra característica que agudiza su peligrosidad es que es una criatura venenosa. Las nueve cabezas de este monstruo son humanas.

Xiang Yao, El mantenimiento de las nueve cabezas

La mitología china cuenta que este monstruo, como tenía nueve cabezas, se alimentaba de nueve maneras diferentes, con comida proveniente de nueve montañas. Su estela de destrucción era tal que por cualquier lugar por el que transitara, lo convertía inmediatamente en fango, pantano y barrancos donde ninguna criatura podría sobrevivir.

Su destrucción era tal, que su eterno acompañante era el dios del agua, Gong Gong, a quien, como ya sabes, ayudaba a fraguar los desastres e inundaciones en la tierra. Tenía poderes sobrenaturales lo suficientemente fuertes como para derrotar a cualquier oponente, de manera que su fuerza y poderío era desafiado por pocos valientes, hasta que alguien por fin le hizo frente.

Xiang Yao muere a manos de Yu

El héroe Yu, se encargó de matar a la bestia. Cuando asesinó a Xiang Yao, su sangre era realmente apestosa, apestaba tanto a podrido que no se podía sembrar absolutamente nada en el lugar donde falleció la criatura.

Yu era uno de los tres reyes sabios, junto con Yao y Shun. Yu determinó que para que la sangre de Xiang Yao dejara de dejar una estela de destrucción en la tierra, tenía que cavar y enterrarla. Entonces excavó la tierra tres veces, pero cada vez la sangre se profundizaba más.

Con la tierra excavada, Yu decidió hacer una gran terraza para los dioses chinos. De ese modo, la terraza la posicionó al norte de la montaña Kunlun y al este de Rouli.

Un mito que no se conserva en la actualidad

Actualmente en China muy poco se habla sobre Xiang Yao, de hecho, muy pocos son los mitos que han traspasado de generación en generación sobre esta bestia. Sin embargo, en el año 1983 se recopilaron algunos textos en una provincia china donde se detalla con Xiang Yao siguió causando estragos en la tierra.

Según estos últimos mitos e historias, una vez que la bestia fue derrotada por Zhu Rong, siguió provocando inundaciones en muchos puntos de la tierra, incluso sin su eterno acompañante Gong Gong. También se le adjudicaron muchos otros daños a la tierra.

Finalmente quien tuvo que enfrentar a la bestia nuevamente para acabar con ella fue la diosa Nüwa, quien terminó por matarla definitivamente. En la historia donde el monstruo es derrotado por la diosa Nüwa, no está representado como una serpiente de nueve cabezas, sino como un dragón con la misma cantidad de testas, que mantenía su característica de venenoso. En su forma de dragón, también devoraba humanos y ganado, por esa razón Nüwa intervino para resolver el problema.