Ryujin

Ryujin es un interesante dios del panteón japonés, dado que es concebido como un dragón japonés que funge como divinidad tutelar del mar según la mitología de este país asiático. El dios Ryujin representa el poder del océano. Era representado con una gran boca y que además tenía la capacidad de convertirse en ser humano según su conveniencia.

Se podría decir que Ryujin es una especie de dios del mar parecido al Neptuno romano o al Poseidón griego. Las criaturas que habitaban los mares eran generalmente observadas como sirvientes de Ryujin por vivir bajo su dominio. Tenía un palacio en las profundidades decorado con colores rojo y blanco. Desde este palacio legendario solía controlar el mar y las olas haciendo uso de sus gemas mágicas, con las cuales tenía la capacidad de apaciguar o embravecer la marea. 

Dinastía imperial de Japón y Ryujin

Algo interesante sobre Ryujin es que es concebido como uno de los antepasados más importantes de la familia imperial japonesa, siendo que su hija Otohime, contrajo nupcias con el príncipe Hoori. Con el transcurrir del tiempo, el Emperador Jimmu sería interpretado como nieto de esta pareja. De esta forma, el dios Ryujin sería un importante antecesor de la dinastía imperial de Japón. 

El Emperador Jimmu era, según la sucesión tradicional del gobierno en Japón, no solo el fundador de ese país, sino su primer gobernante formal, su primer emperador. Es por esta razón que se considera como el antecesor de toda la línea de la dinastía japonesa. Según la historia mitológica, el reinado de este personaje perduró por aproximadamente 76 años, hasta el momento de su muerte en 585 a.C. 

Aunque la existencia de este personaje entra entre los datos mitológicos más que históricos de la nación, dado a que no se tiene certeza de que tal personaje haya existido; la familia imperial japonesa se sigue apegando a la tradicional descendencia del Emperador Jimmu como un ancestro de su linaje. 

De hecho, en Japón se celebra el día 11 de febrero como el de la fundación nacional, en honor a la ascensión del Emperador Jimmu al trono ese mismo día pero del año 660 antes de Cristo. En Japón ese es un día de fiesta nacional, pese a que no se tenga la plena certeza de que los hechos ocurrieron como se ha contado a través de los años. 

Ryujin ayudó a lograr la invasión a Corea

Según cuenta una leyenda mitológica, la Emperatriz Jingú se decidió a atacar Corea, pero para hacerlo decidió tomar las gemas de Ryujin, pues con estas tendría ventaja en la batalla, y de hecho así fue. Cuando llegó a las costas de Corea, la marina coreana se acercó para defender su territorio, pero la Emperatriz lanzó la primera de las gemas, Kaju. Esta gema tenía el poder de bajar las mareas. 

Con la marea baja los barcos de la marina encallaron, así que los coreanos bajaron de la flota para pelear en contra de la Emperatriz con sus propios cuerpos, pero luego ella utilizó la gema Manju que era la de la marea alta. Con esta acción las aguas volvieron a crecer, haciendo que todos los tripulantes de los barcos que se habían bajado de estos, murieran ahogados al instante. 

Ryujin y la leyenda de las medusas sin huesos

Otro mito que ronda a la figura del dios Ryujin es de cuando dejó a las medusas sin huesos en sus cuerpos. Según el mito, Ryujin quería comer hígado de mono porque esta era la comida que le permitiría batallar contra un escozor que lo tenía impaciente. Para saciar sus deseos, llamó a las medusas para que fueran en búsqueda del mono para comer. Ellas accedieron al llamado y fueron a buscar el mono para Ryujin

Cuando consiguieron al mono, éste las engañó diciendo que debía ir por el hígado porque lo había dejado en una jarra en el medio del bosque. Evidentemente el mono nunca regresó y las medusas fueron con Ryujin a contarle lo que había ocurrido. El dios encolerizado, las golpeó tanto que les quebró todos los huesos.